En una situación que ha prevalecido en las últimas administraciones, la corrupción y el crimen organizado sigue operando dentro de las aduanas del país sin poder ser controlado.
Dos directores destituidos, una aceptación tácita del fracaso, así como denuncias de corrupción ha puesto en evidencia lo que se vive en las aduanas del país.
Ricardo Peralta, actual subsecretario de Gobernación y primer director de aduanas en la 4T (quien duró 5 meses en el cargo) dijo haber despedido a 92 por ciento del personal para limpiar esa administración y que su sucesor, Ricardo Ahued (quien duró 11 meses en el cargo), dijera que investigaba a 39 de 49 directores por corruptos, la situación no cambia.
Ayer, el Presidente López Obrador, al confirmar la dimisión de Ahued a Aduanas, reconoció que esa área es una asignatura pendiente de su Gobierno.
«En el caso de las aduanas viene una limpia porque se han hecho intentos (…) es un monstruo lo de aduanas, de 100 cabezas», admitió.
Y es que el crimen organizado controla y asedia las aduanas, lo que el presidente llama «el monstruo de las 10 cabezas».
Las aduanas, como lo ha reconocido el gobierno de Andrés Manuel, son puntos donde predomina el crimen, la ilegalidad y los negocios que mueven la importación y exportación del país.
Cifras oficiales que maneja el SAT, en las 49 aduanas que hay en México -19 en la frontera norte, dos en la frontera sur, 11 interiores y 17 marítimas-, se factura sólo por concepto de IVA, 447 millones de pesos al año por todas las mercancías que pasan a través de los puntos aduanales.
Según información publicada por Reforma, Manzanillo, puerto de entrada para miles de toneladas de precursores químicos para elaboración de drogas como el fentanilo, tuvo entre enero y marzo pasado 95 asesinatos, 21 por ciento más que el año pasado lo que ha convertido al estado de Colima en la entidad con mayor tasa de homicidios en el país por cada 100 mil habitantes.
En Nuevo Laredo, tamaulipas, la violencia también se ha disparado y se han producido 16 homicidios de narcoviolencia. Esta ciudad se utiliza como ruta para transportar distintas importaciones como por ejemplo de textiles.
A principios del sexenio, con Peralta como titular del área fue incorporado como Administrador Central de Investigación Aduanera, Jesús Torres Charles, quien en una anterior encomienda en el Gobierno de Coahuila en 2012 pidió licencia por una investigación de la PGR que vinculó a su hermano con Los Zetas.
Carlos Mendoza, consultor en temas de seguridad, indicó que las Aduanas han sido desde hace varias administraciones un problema para la seguridad del país y que la actual administración federal tampoco ha podido resolver.
«Es un tema delicado, es un tema al que no se le ha encontrado la fórmula», dice.
Las armas y municiones que usan los grupos del crimen organizado, señaló, pasan por las aduanas y los altos índices de homicidios y violencia criminal evidencian que estos recintos siguen siendo altamente porosos.
bl