MÉXICO 20 DE JUNIO 2018(LA SILLA ROTA).-Fueron 3 minutos y 56 segundos lo que demoraron sicarios de la Unión del Betito en arrojar dos cuerpos desmembrados en Insurgentes y colgar una narcomanta, pero nadie los vio.
Las cámaras del C4 enfocaron hacia el puente vehicular que cruza Insurgentes y Flores Magón hasta que los sospechosos habían huido, cuando los restos ya se apreciaban sobre el carril confinado del Metrobús, en el Puente de Nonoalco.
Con base en avances de la indagatoria CUH-2/UI-3C/D/4192/06-2018, agentes de la Procuraduría capitalina (PGJ-CDMX) detectaron, además de un camión de volteo, otro vehículo involucrado en los hechos.
Se trata de un automóvil blanco con quemacocos, cuya marca y modelo no han sido precisados, pero al parecer se trata de un Mercedes Benz Clase C 250.
La cámara ID 10621 captó el coche detenido a las 5:18 horas del domingo sobre el puente vehicular, pero los operadores del C4 no le tomaron importancia y dirigieron la grabación a otro punto.
Casi cuatro minutos más tarde, la videocámara enfocó nuevamente hacia el puente y el automóvil ya no estaba, pero sí una manta colgando.
Alertados por lo ocurrido, los servidores públicos hicieron zoom hacia Insurgentes y observaron lo que parecían restos humanos, video que reveló La Silla Rota este lunes 18 de junio sobre los descuartizados en las inmediaciones de Tlatelolco.
El hallazgo del camión y el coche blanco lo hicieron detectives usando el videoreplay.
Acorde con las pesquisas, la primera vez que el coche blanco fue captado ocurrió a las 5:08 horas en Ricardo Flores Magón y Peral, con la cámara ID: 10449.
Se cree que salió de la zona de Ferrocarril de Cintura, en la colonia Morelos, donde pudieron haber sido secuestradas las víctimas horas antes, y el camión de volteo lo siguió desde otro punto hacia el puente vehicular.
Inclusive, la cámara ID: 7747 grabó el paso de dicho camión, seguido por una patrulla de la Policía capitalina, a las 5:13 horas.
La posible colusión de algún funcionario con los responsables no se descarta, según admitió el Procurador capitalino, Edmundo Garrido Osorio, al ser cuestionado tras el arranque de un operativo en Tepito y Garibaldi derivado de estos crímenes.
«Están abiertas todas las líneas de investigación (con respecto a complicidad de policías), nada se ha cerrado y lo que vaya saliendo, fortaleciendo con los indicios que tenemos, irán descartando algunas líneas en ese sentido», explicó.
Admitió que no hay testigos de cómo fueron arrojadas las partes de los narcomenudistas y que el C4 solamente enfocó hacia el sitio, cuando ya se había consumado el delito.
El resto de la cara de uno de los hombres asesinados, así como más partes fueron encontrados este martes en la autopista México-Pachuca, a la altura de San Juan Ixhuatepec, en el Estado de México.