Fotografía: FIFA World Cup
Por: ACD/Antonio Ramírez Águila
NÓVGOROD, RUSIA 17 DE JUNIO DE 2018.- Luego del inesperado triunfo de México ante Alemania, la batalla por los boletos se vuelve más cruda en el grupo F, sobre todo para el resto de los participantes que mañana se verán las caras, Suecia y Corea del Sur.
Suecia vuelve a la Copa del Mundo después de doce años de ausencia, tiempo en el que han dejado atrás a varios elementos valiosos, especialmente su astro el veterano Zlatan Ibrahimović, pero él ha sido reemplazado por elementos más jóvenes y con talento, como es el caso de John Guidetti, pero a su vez, la escuadra escandinava solamente ha ganado uno de sus seis últimos partidos amistosos, lo que siembra dudas sobre el nivel real del equipo sueco para enfrentar el Mundial, aunque cuentan a su favor el haber eliminado a equipos de mayor jerarquía como Italia y Holanda.
Corea en cambio, no se ha perdido ningún mundial desde 1986, y poco a poco ha dejado de ser un rival “pequeño” para convertirse en un rival de respeto.
Los surcoreanos han participado en diez ediciones del Mundial, y su mejor participación fue en el 2002, cuando compartió sede con Japón, llegando a las semifinales, sin embargo, esa edición quedó empañada por las descaradas ayudas arbitrales a favor del anfitrión.
Los nórdicos han ido a doce Mundiales, y fueron sede de la edición de 1958, en la que alcanzaron su única final, pero fueron humillados por un joven Edson Arantes do Nascimento, quien estaba llamado para hacer historia.
La primera vez que se vieron las caras ambos equipos fue en los Juegos Olímpicos de Londres 1948, y ese partido terminó en goleada por marcador de 12-0 a favor de Suecia, y desde entonces, jamás han vuelto a verse en competencias oficiales hasta ahora, en donde pelearán por un boleto en el llamado “grupo de la muerte”.