OAXACA, OAXACA 21 DE OCTUBRE DE 2016 (WdC).– Dentro de las actividades que se vienen realizando en la hacienda El Rosario, con motivo del noveno festival del mole de caderas, se han presentado diversas compañías dancísticas, entre las que se destacan la delegación del grupo folclórico de la Casa de la Cultura maestro ‘Antonio Martínez Corro’ de esta ciudad mixteca, que presentó el inigualable e insuperable ‘Jarabe Mixteco’.
En tanto que la delegación de Santiago Juxtlahuaca, con su danza autóctona de ‘Los Rubios’ en el que hombres y mujeres bailan al compás del violín y tambora, es un bailable tradicional que va relacionado con el arreo de ganado cabrío, en ella el caporal y María Lencha, derrochan sus energías en el coqueteo y burlescos pasos, expresando el cansancio y rudeza del trabajo del campo, al tiempo expresan su desprecio al patrón que los explota en la rudeza arreada de chivos en las montañas de la Mixteca oaxaqueña.
Una gama del folclor de gran nación mixteca se ha manifestado en sus diversas expresiones en las instalaciones de la hacienda El Rosario, al desarrollarse la matanza de chivos de la que un puñado de hombres y mujeres se apresuran a pelar la piel y cortar las cornamentas, prepara trozos de huesos de la que luego preparan el tradicional mole de caderas, las tripas y ubres entre otros retazos se van almacenando previamente secados en los rayos solares que en los próximos serán preparados en un rico guiso para el paladar al aproximarse las festividades de ´Todos Santos’.
La danza va entrelazada con las actividades de la matanza, porque dentro de su ceremonia, los matanceros o matadores bailan con el chivo sobre sus hombros, como un acto de ofrenda al señor de las montañas, es un presente para las deidades del universo campirano, representa una ofrenda maternal entre los hombres y el universo mismo, un obsequio para los dioses del tiempo por los siglos de los siglos.
La danza va entrelazada con las actividades de la matanza, porque dentro de su ceremonia, los matanceros o matadores bailan con el chivo sobre sus hombros, como un acto de ofrenda al señor de las montañas, es un presente para las deidades del universo campirano, representa una ofrenda maternal entre los hombres y el universo mismo, un obsequio para los dioses del tiempo por los siglos de los siglos.
En tal sentido se llevada a cabo la ceremonia de las danzas autóctonos y tradicionales de la región mixteca, ejecutándose magistralmente por las compañías de la danza de ‘Los Rubios’ de Santiago Juxtlahuaca, ‘Los Diablos’ de la colonia Providencia de esta ciudad y la delegación de la Casa de la Cultura de Huajuapan de León.
En este tenor se lleva a cabo el derroche de danzas en la explanada de la Matanza en la haciendo El Rosario, que preservan con esmero para la generaciones venideras por la familia Maza Santibáñez, encabezada por Fernando Antonio Maza Santibáñez y sus hermanos y hermanos, porque es una herencia cultural intangible de los mixtecos, llena de folclor campirana y misticismo cultural.
En este tenor se lleva a cabo el derroche de danzas en la explanada de la Matanza en la haciendo El Rosario, que preservan con esmero para la generaciones venideras por la familia Maza Santibáñez, encabezada por Fernando Antonio Maza Santibáñez y sus hermanos y hermanos, porque es una herencia cultural intangible de los mixtecos, llena de folclor campirana y misticismo cultural.
En tanto que Jarabe Mixteco por su propia naturaleza es la máxima expresión natural intangible y esencia de los hombres de Ñuú Vico (Pueblo o país de las nubes). La matanza de chivos se conjuga en lo tangible e intangible del folclor de los huajuapenses, puerta y orgullo de Oaxaca y México por preservar sus tradiciones culturales y fomentarlo para las generaciones venideras para hacer cada día más grande e importante la tierra del Sol.Dentro de las actividades que se vienen realizando en la hacienda El Rosario, con motivo del noveno festival del mole de caderas, se han presentado diversas compañías dancísticas, entre las que se destacan la delegación del grupo folclórico de la Casa de la Cultura maestro ‘Antonio Martínez Corro’ de esta ciudad mixteca, que presentó el inigualable e insuperable ‘Jarabe Mixteco’.
En tanto que la delegación de Santiago Juxtlahuaca, con su danza autóctona de ‘Los Rubios’ en el que hombres y mujeres bailan al compás del violín y tambora, es un bailable tradicional que va relacionado con el arreo de ganado cabrío, en ella el caporal y María Lencha, derrochan sus energías en el coqueteo y burlescos pasos, expresando el cansancio y rudeza del trabajo del campo, al tiempo expresan su desprecio al patrón que los explota en la rudeza arreada de chivos en las montañas de la Mixteca oaxaqueña.
Una gama del folclor de gran nación mixteca se ha manifestado en sus diversas expresiones en las instalaciones de la hacienda El Rosario, al desarrollarse la matanza de chivos de la que un puñado de hombres y mujeres se apresuran a pelar la piel y cortar las cornamentas, prepara trozos de huesos de la que luego preparan el tradicional mole de caderas, las tripas y ubres entre otros retazos se van almacenando previamente secados en los rayos solares que en los próximos serán preparados en un rico guiso para el paladar al aproximarse las festividades de ´Todos Santos’.
La danza va entrelazada con las actividades de la matanza, porque dentro de su ceremonia, los matanceros o matadores bailan con el chivo sobre sus hombros, como un acto de ofrenda al señor de las montañas, es un presente para las deidades del universo campirano, representa una ofrenda maternal entre los hombres y el universo mismo, un obsequio para los dioses del tiempo por los siglos de los siglos.
En tal sentido se llevada a cabo la ceremonia de las danzas autóctonos y tradicionales de la región mixteca, ejecutándose magistralmente por las compañías de la danza de ‘Los Rubios’ de Santiago Juxtlahuaca, ‘Los Diablos’ de la colonia Providencia de esta ciudad y la delegación de la Casa de la Cultura de Huajuapan de León.
En este tenor se lleva a cabo el derroche de danzas en la explanada de la Matanza en la haciendo El Rosario, que preservan con esmero para la generaciones venideras por la familia Maza Santibáñez, encabezada por Fernando Antonio Maza Santibáñez y sus hermanos y hermanos, porque es una herencia cultural intangible de los mixtecos, llena de folclor campirana y misticismo cultural.
En tanto que Jarabe Mixteco por su propia naturaleza es la máxima expresión natural intangible y esencia de los hombres de Ñuú Vico (Pueblo o país de las nubes). La matanza de chivos se conjuga en lo tangible e intangible del folclor de los huajuapenses, puerta y orgullo de Oaxaca y México por preservar sus tradiciones culturales y fomentarlo para las generaciones venideras para hacer cada día más grande e importante la tierra del Sol.
