CIUDAD DE MÉXICO (La Silla Rota).- A tres semanas del primer gasolinazo de este año, los precios de productos de la canasta básica se han incrementado en la Central de Abasto (Ceda), y aumentan todavía más en supermercados y mercados públicos, dependiendo de la zona donde estos se ubiquen.
En la Ceda, a partir del incremento en las gasolinas registrado el 1 de enero, los costos de perecederos han subido en promedio entre 5 y 8 pesos por producto.
Pero los precios manejados en la Ceda varían y se elevan, en algunos casos hasta el doble, en tiendas de autoservicio y mercados populares, lo cual se constató en recorridos.
Al visitar establecimientos de la Central de Abasto, locatarios y sus clientes comentaron que los precios de los productos varían constantemente, desde el “gasolinazo”, y aunque los aumentos son de unos pesos, los consumidores sí han resentido el golpe a sus bolsillos.
“Los precios han subido porque el flete cuesta más por lo del gasolinazo, y a veces llegan más caros los productos que otros días, varían dos, cinco pesos, no es mucho, pero los clientes sí lo notan”, comentó Juan Carlos, comerciante de verduras.
“Normalmente voy al mercado de mi casa, pero como todo ha subido, ahora prefiero venir a la Central para ahorrarme unos pesos, aunque, por ejemplo, el limón subió al doble porque la semana pasada lo compré en 8 pesos y ahorita está en 16”, dijo Estela, vecina del municipio de Nezahualcóyotl.
Durante la primera semana de enero, en la Ceda un kilo de aguacate costaba máximo 30 pesos, y ahora se vende entre los 35 y 40 pesos, y el del limón pasó, en el mejor de los casos, de 10 a 16 pesos.
Esos precios son más elevados en el supermercado, donde el kilo de aguacate llega a los 47.90 pesos, y el del limón alcanza los 27.90 pesos, esto es una diferencia de entre 7 y 9 pesos, en comparación con los costos registrados en el Fideicomiso.
En los mercados públicos, los consumidores pueden encontrar productos al mismo costo que en la Central de Abasto, pero también pueden ser más elevados, dependiendo de la calidad de la mercancía y la ubicación del mercado.
En el mercado de Portales, un kilo de aguacate puede ir de los 30 a los 60 pesos, mientras que en Coyoacán, los locatarios lo ofrecen en 70 y hasta 100 pesos.
En el caso del kilo de limón, en Portales varía entre los 20 y los 26 pesos, y en Coyoacán, el costo se eleva hasta los 30 pesos.
“El aguacate nos está llegando muy caro, pero es de muy buena calidad, a lo mejor puedes encontrarlo más barato, pero no está tan bueno”, justificó una locataria de Coyoacán que ofrece el kilo de aguacate en 100 pesos.
“Desde que están las alzas en los precios, hay muchos abusos de parte de los locatarios de diferentes mercados, ya no nos queda más que buscar las mejores opciones”, compartió doña Lourdes, vecina de Coyoacán.
Durante los recorridos, se constató la variedad de precios en otros productos perecederos como el jitomate, cuyo costo por kilo en la Ceda es de 8, 9 y 10 pesos; en el mercado Portales va de los 10 a los 16 pesos; en Coyoacán está en 16 pesos, y en Walmart cuesta 13.90 pesos.
En tanto, el precio del kilo de papa en la Central varía entre los 8 y 10 pesos; en Portales, entre 10 y 16 pesos, en el supermercado, cuesta 16.50 pesos, mientras que en el mercado de Coyoacán alcanza los 22 pesos.
Un producto que forma parte de la canasta básica, como es el huevo blanco, en la Ceda puede comprarse en 17.50 y 22 pesos el kilo, mientras que en el mercado público de Portales está en 22 pesos; en Coyoacán, en 28 pesos, y en Walmart su precio oscila entre 30 y 32 pesos cada kilo, dependiendo de la marca.
“Aunque nos dan precio preferencial a nosotros como trabajadores, yo prefiero comprar mi verdura en el mercado porque sé que es más barato que aquí. También sé que es más barato en la Central de Abasto, pero queda lejos de mi casa y lo que me ahorre, tal vez me lo gasto en pasajes”, dijo Rocío, empleada de Walmart.